miércoles, noviembre 29, 2006

Las cosas simples

Hace mucho tiempo que no me sentaba a escribir, el libro de Ampuero me dejó destruida por un buen rato, pero ahora me siento con más ánimo para hablar más racionalmente y no involucrar sentimientos que por lo demás me da mucho pudor.

Los días me han acompañado para poder ir a la playita y encontrarme conmigo y mis amigas playeras de años. Para los que no viven en un lugar como Viña del Mar, les contaré que ésta es la mejor fecha de Reñaca tenemos todo el paisaje a nuestra disposición. Si alguno de ustedes ha visto en algún momento de su vida una teleserie brasileña ambientada en Rio de Janeiro,así mismo tenemos esos personajes en el quinto sector de Reñaca. Lo que me llama muchísimo la atención es lo abúlico del viñamarino, tal vez el nacer con el mar enfrente nos hace no disfrutar de la maravilla de la costa. Independientemente que el sol es dañino, las personas que se acercan al mar son en su mayoría deportistas o al menos de alma deportiva, es un denominador común, ya que invierno o verano siempre están ahí, ya sea jugando paletas casi profesionalmente, el grupo de jugadores de fútbol, los maratonistas(FULLMARATHON) que sagradamente trotan y tienen hasta marcado los kilómetros ,los ciclistas , los veleristas un agrado mirar el mar cuando hay regata, los infaltables surfistas con sus tablas y onda especial, todos aquellos caminantes jóvenes, madurones , hombres mujeres, niños, embarazadas en fin ...... un sinnúmero de personas capaces de disfrutar de las cosas simples de la vida sin costo alguno. Estos son los días en que uno se levanta y agradece a Dios por ser tan afortunado de poder compartir el milagro de la vida en sociedad.